Paseando (Dulce)

Aquel día no parecía que fuese a ser elamente divertido o tan solo interesante, tan solo como todos aburrido. Era lógico después de 209 años viviendo todo parece ir repitiendose en una espiral incabable. Las últimas luces del día brillaban, molestando mi visión con levedaz, aunque ya acostumbrado a la luz solar aquella tarde estaba débil y decidí cubrir mis ojos con una gafas de sol oscuras. Recorrí la ciad hasta llegar al río y me apoyé en la barandilla de piedra, exalando el humo de mi cigarrillo, dándole la espalda al rojizo sol que ya desaparecía dándole lugar a la noche.

Oí una voz hablándome y giré mi rostro para contemplar a una muchacha, una de los míos me dije por su olor a cenizas y muerte.
-No...no interrumpes para nada...-le dije con una voz que parecía arrastrar las palabras.

La observé reguardarse bajo un árbol, sonreí con levedaz, una neófita...
-Paseaba...-le dije y luego girándome para mirarla le dije aún con aquel tono de voz que no dejaba de ser atercipelado:-No temas, la noche ya cae...-le dije.

Me mantuve con la mirada posada en ella.
-Entonces tu olor no me engañaba, eres como yo...-dije.-Damon.

Observé desaparecer lo último de aquella esfera luminosa y me quité las gafas, dejando al descubierto mis ojos verdes.
-Al fin.-dije.

Luego de que el se sacara sus lentes vi sus ojor verdes. Sonrei dulcemente y le dije
- Que edad tienes?
Le pregunte algo curiosa pero igualmente con un tono bajo.

La miré, parecía ser una joven curiosa, posiblemente muy nueva en aquello de ser un monstruo.
-18 años, aunque se supone que en realidad tengo 209 años, señorita.-le dije con una leve sonrisa.-Se que es de mala educación, pero su pregunta me hace querer saber también la suya.

Lo escuche y asenti con la cabeza... Luego le conteste aun con una voz suave
-Tengo 16 años...Me convirtieron hace tres semanas y tres dias...
Luego mire el lago sin decir nada, no sabia que iba a contestar al respecto. Aveces me sentia realmente deprimida, pero no sabia porque, talvez el ser un monstruo era muy dificil.

Me apoyé de nuevo en la barandilla y mirando al río le dije:

-Dos consejos, no te fíes de los que son como nosotros, no todos pretenderán ayudarte, algunos intentarán matarte.-le dije con una voz calmada, yo ya había pasado por aquello, algunos como nosotros habían intentado cesar mi vida.-Sé que es difícil al principio, la sed es insaciable...tan solo ten paciencia y encuentra a alguien que se encargue de ti, mucho mejor si es la persona que te transformó, sabrá lo que necesitas...ser lo que somos es distinto...puedes verlo como quieras, como un don o una maldición.

Cuando lo escuche, me asuste un poco, no sabia que pensar, pero luego me quede algo pensativa, y mientras me apollaba en la barandilla al igual que Damon le conteste
-Aun no me ah pasado nada que me haga interpretarlo como un don...
Miy resignada, me quede aun muy pensativa en todo lo que me habia pasado ultimamente.

-No todo el mundo vivirá eternamente.-le dije con una leve sonrisa.-Tú lo harás, tan solo no te encariñes demasiado con el resto de personas que no son como tú.

Sonrei levemente al escucharlo y luego le conteste
-Aun no me siento como lo que soy. Y me tengo algo de miedo...
Suspirando algo apenada

-Con el tiempo te acostumbrarás...ahora tienes mucha sed, pero es porque tu cuerpo esta aún asimilando el cambio.-le expliqué y acaricié sus cabellos.-No te temas,no vas a hacerte daño, a no ser que quieras.

Sonrei al notar que acariaba mis cabellos, luego lo mire a los ojos y le dije.
-Gracias... Tu si que sabes levantarme el animo...
Dije aun con una sonrisa, pero con el tono bajo.

Me volví de nuevo hacia el río.
-Somos lo mismo, apesar de que no somos la mejor criatura y que muchas veces rivalicemos...ayudarnos a veces no esta de más.-le dije, normalmente no me comportaba de aquella forma, no ayudaba ni me preocupaba por nadie... pero aquellos días eran extraños.

Lo escuche, y con una pequeña sonrisa me quede mirando el rio... -Es bueno tener a alguien que te comprenda... no crees? .-Aun con una voz muy baja, que casi no se escuchaba.

-Sí, pero simplemente a veces no llegan a comprenderte realmente, a pesar de lo muy parecidos que podamos llegar a ser también somos muy distintos.-le dije con una leve sonrisa, mientras el viento golpeba mi rostro, refrescándolo y agitando mis rubios cabellos.-Aún así...esta bién poder creer que realmente lo hace...-dije casi en un susurro cn una voz suave, cerrando mis ojos para disfrutar de la leve brisa y quizás porque en parte mi comentario meentristecía por la verdad que decía.

Lo escuche atentamente... Luego senti al viento que golpeaba nuestros rostros, hice una pequeña sonrisa luego senti como ahora se convertia en una leve brisa, sonrei y le dije tambien en un susurro . -Aveces, las cosas son mejores si crees en eso...- No lo mire, simplemente me quede mirando el atardecer.

-¿Incluso si hacerte creer en ello es engañarte a ti mismo?-le pregunté sin dirigir mi mirada hacia ella.

Me quede pensativa un segundo y le conteste [color=brown]-Si... creo que si...-[/purple] Ya que aveces era conveniente engañarse a si mismo.

-¿Incluso si eso a la larga te hará sufrir?-dije esta vez y la miré por el rabillo del ojo.